De que llueve, llueve. Pero no hay necesidad de dejar que arruine tu experiencia de campamento. Aquí hay algunas recomendaciones para acampar bajo la lluvia y ayudarte a mantenerte seco y feliz cuando el aguacero comienza a caer.
1. Encuentra el sitio adecuado para instalar la tienda.
Elige terreno elevado para tu campamento, que no esté al lado de un río o lago. No es divertido despertarse con un charco de agua debajo de tu saco de dormir durante un aguacero. Aún mejor, orienta tu tienda en dirección hacia donde sale el sol, será más fácil sacarse en las mañanas lluviosas. Y hagas lo que hagas, no te instales debajo de un árbol. Mucho después de que haya cesado la lluvia, las gotas de lluvia seguirán goteando sobre tu cabeza y las ramas que caen podrían lastimarte si el viento arrecia durante la noche.
2. Ilumina la noche
Las luces pueden ayudar a mejorar el ambiente debajo de la lona o la copa de los árboles. Ten a la mano luces LED para cubrir el campamento, enciende algunas velas dentro de frascos y empaca una buena linterna de mano o de cabeza. Recuerda traer baterías adicionales; Las baterías de litio son extra confiables en climas fríos. Si crees que volverás tarde después de una caminata, coloca reflectores en los árboles cerca de tu tienda de campaña para que puedas encontrar el camino de regreso en la oscuridad.
3. Crea una sala de estar al aire libre
Cuando finalicen las actividades del día, no permitas que todos se retiren a sus tiendas de campaña: crea una sala de estar al aire libre. Forma un refugio de lluvia para acampar colocando una lona o dos encima, y una en el suelo también. Luego instala sillas de campamento, luces ambientales, prepara algunos bocadillos, es tiempo de compartir las experiencias vividas.
4. Poder (comida) para la gente
Después de regresar de una caminata, manten a raya el frío y la humedad con algo de comida reconfortante. Una taza de chocolate caliente siempre cae bien en tardes lluviosas. ¿Traes una pizza para calentar en la fogata o una receta de lasaña para preparar? Ahora es el momento de disfrutar eso. Los humanos necesitamos más calorías para mantener la temperatura corporal cuando hace frío, por lo que debemos consumir carbohidratos. Siempre es bueno agregar algunas verduras a la mezcla, pero hazte un favor y prepáralas primero, en tu casa, en lugar de pelarlas y picarlas en el frío.
5. Sistema de capas
El equipo de lluvia adecuado para acampar y un buen sistema de capas ayudarán a regular la temperatura de tu cuerpo, absorberán la humedad mientras estás activo y retendrán el calor corporal cuando se enfríe. Elige la base y las capas medias de poliéster o lana debajo de una chaqueta impermeable o poncho para la lluvia. El algodón nunca es una buena opción, porque cuando se moja, permanece húmedo, lo que hará que la temperatura de su cuerpo caiga rápidamente. Asegúrate de empacar un conjunto adicional de capas base y calcetines de lana en una bolsa impermeable para cuando regreses al campamento tu querrás cambiar a ropa seca y tomar una taza de algo caliente.
6. Opta por el anaranjado
¿El reporte meteorológico indica tormenta? No olvides usar colores brillantes como el rojo o el anaranjado. En caso de alguna contingencia los colores brillantes son mucho mas reconocibles en el bosque.
7. Cuelga, luego sigue colgando
Cuando tu ropa está empapada, puede ser tentador tirarla a la esquina y acurrucarse en tu saco de dormir. Considera colgar cualquier ropa mojada primero. Por la mañana nos lo agradecerás, cuando tengas ropa seca que no huela a moho. Arma un tendedero y colócalo debajo de una lona o en el vestíbulo de tu tienda para que puedas colgar toda tu ropa mojada para que se seque. Tomarte tiempo para controlar el factor de humedad hará que su viaje sea mucho más placentero. Consejo profesional: si estás desesperado por la ropa seca, pon algunos artículos húmedos en tu saco de dormir. El calor de tu cuerpo los secará durante la noche.
8. Agrega una bolsa Bivy
Cuando el suelo esté húmedo y frío, agrega una bolsa Bivy para mantenerte caliente. Esta capa adicional de aislamiento ayudará a proteger tu saco de dormir de la humedad y también puede ayudar a retener un poco de calor.
También puedes utilizar un bajo alfombra para dormir y/o colchón inflable para mantenerte más caliente. Una vez que estés acurrucado por la noche, trata de mantener tu cara expuesta. Respirar dentro de la bolsa puede provocar que el aislamiento la humedezca, lo que afectará su rendimiento. Aún mejor: elige una bolsa sintética que aísle incluso cuando está mojada.
9. Precalentar a 37 grados celsius
Para evitar tener que ponerse ropa fría, ¡precaliéntela a 37 grados! Empaca la ropa de mañana en una bolsa pequeña y transpirable y métela en tu saco de dormir para que se mantenga agradable y caliente al lado de tu cuerpo durante la noche. Tener ropa abrigada para ponerse por la mañana hace que las mañanas frías sean mucho mejores.
10. Saca los calentadores de manos
La mala circulación te puede afectar cuando te encuentras empapado allá afuera. Saca los calentadores de manos. Pon unos pocos en tus botas para hacer el desayuno un poco más acogedor, y luego pon en acción esos pies cálidos y felices en tu caminata matutina.
11. Voltear y sorber
¿Alguna vez despertaste para encontrar que tu botella de agua se ha congelado durante la noche? Voltea tu botella de agua. El agua siempre se congela desde la parte superior. Si las temperaturas caen por debajo del punto de congelación durante la noche, pon la botella de agua boca abajo para que el fondo se congele en su lugar y pueda tomar al menos algunos sorbos por la mañana.
12. Salva el día con polainas
Considera usar pantalones para la lluvia o empacar polainas. Las hojas mojadas y el rocío de la mañana pueden mojarte rápidamente e incluso remojarte los pantalones. Pantalones de lluvia y polainas pueden salvar el día.
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